Tras la realización de cualquier pedido de mercancia, nuestra labor no termina con hacer la planta sino haciéndola llegar al cliente en las mejores condiciones posibles. La opción de forma de transporte la elige el cliente según sus necesidades, sobre todo, de cantidades o precios de transporte. Puede hacerse a granel para cantidades grandes pero lo más habitual para que la mercancía no se deteriore es mediante palets o carros.

Dependiendo del tipo de mercancía que se vaya a enviar, las cantidades que pueden prepararse para cada método varían. Pero el estado en que llega la planta es mejor que por otros medios.


El embalaje también es opcional, pues puede hacerse con film estirable o mediante malla.

Finalmente se etiqueta bien tanto el carro como el palet para que su destino sea el correcto.